“Cada quien tiene en la vida su cuarto de hora que lo motiva que lo entusiasma a ser triunfante es un momento de buena suerte que uno lo adora es mi momento esa es mi estrella y voy pa’ lante”, esa es la frase que identifica a este fenómeno de la música vallenata actual, ese muchachito que se metió en las entrañas y en los corazones de los jóvenes, adultos y hasta la tercera edad se deleita con la canciones de este gran Urumitero.
Este digno representante de la nueva generación folclórica que mueve masas de una forma inagotable se ha convertido en ídolo de multitudes, es un fenómeno original dentro de su expresión folclórica, con una proyección envidiable que lo lleva a escalar con una facilidad en la escalera del éxito y el posicionamiento de los grandes artistas.
Polémico como todos los concederos de la música vallenata, arrogante a la hora de inventar y traducir notas, sones, melodías y demás combinaciones que solo a este brillante del buen buquet del folclor se le ocurren, tiene en su haber una fanaticada fiel y firme que se identifica como la mancha roja a la cual se integra con vitrinazo incluido y su apoyo incondicional el gran Diego Vence en mi Villanueva del alma.
Hoy nos descreta con su nueva producción, “No me compares con nadie”, marcando la diferencia como siempre y alborotando a todo el entorno Nacional e Internacional, así suene raro, es un artista que emula con sus lanzamientos y excentricidades al que en una oportunidad tenia este gran don, el cacique de la junta Diomedes Díaz, ese es el palomito Dangond, el hijo del gran Palomo, al que le crecieron las alas y hoy está aprovechando los vientos que soplan a su favor.
En buena hora encontramos estas manifestaciones generadas por un buen artista que al lado de un impecable acordeonero forman la combinación perfecta para arrojar un buen producto masterizado en una compilación de oportunas canciones que deleitan al momento de escucharlas y analizarlas, una vez más deseo para este gran intérprete de nuestro folclor, éxitos en su carrera y que siga aprovechando esos vientos que hoy por hoy lo tienen sostenido y posicionado de la mano de Dios en el pedestal de los más grandes del folclor, resalto el apoyo y la simpatía del gran Manuel Alejandro Vence Quintero, el silvestrista mayor en el Roque de Alba de mi tierra natal.
Con el cariño y el respeto de siempre.
Raymon Guillermo Sales Contreras
Columnista Villanueva mi@
Este digno representante de la nueva generación folclórica que mueve masas de una forma inagotable se ha convertido en ídolo de multitudes, es un fenómeno original dentro de su expresión folclórica, con una proyección envidiable que lo lleva a escalar con una facilidad en la escalera del éxito y el posicionamiento de los grandes artistas.
Polémico como todos los concederos de la música vallenata, arrogante a la hora de inventar y traducir notas, sones, melodías y demás combinaciones que solo a este brillante del buen buquet del folclor se le ocurren, tiene en su haber una fanaticada fiel y firme que se identifica como la mancha roja a la cual se integra con vitrinazo incluido y su apoyo incondicional el gran Diego Vence en mi Villanueva del alma.
Hoy nos descreta con su nueva producción, “No me compares con nadie”, marcando la diferencia como siempre y alborotando a todo el entorno Nacional e Internacional, así suene raro, es un artista que emula con sus lanzamientos y excentricidades al que en una oportunidad tenia este gran don, el cacique de la junta Diomedes Díaz, ese es el palomito Dangond, el hijo del gran Palomo, al que le crecieron las alas y hoy está aprovechando los vientos que soplan a su favor.
En buena hora encontramos estas manifestaciones generadas por un buen artista que al lado de un impecable acordeonero forman la combinación perfecta para arrojar un buen producto masterizado en una compilación de oportunas canciones que deleitan al momento de escucharlas y analizarlas, una vez más deseo para este gran intérprete de nuestro folclor, éxitos en su carrera y que siga aprovechando esos vientos que hoy por hoy lo tienen sostenido y posicionado de la mano de Dios en el pedestal de los más grandes del folclor, resalto el apoyo y la simpatía del gran Manuel Alejandro Vence Quintero, el silvestrista mayor en el Roque de Alba de mi tierra natal.
Con el cariño y el respeto de siempre.
Raymon Guillermo Sales Contreras
Columnista Villanueva mi@
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