“Cuatro características corresponden al juez: Escuchar cortésmente,
responder sabiamente, ponderar prudentemente y decidir imparcialmente”.
Sócrates.
La Deforma Constitucional que se quiso aprobar en el congreso de la república
nos dejó entrever una vez más, la intención con la que llegan los políticos a
ese recinto burocrático, no en vano debemos sentirnos aludido porque uno de los
que más beneficios iba a obtener es nuestro coterráneo Emilio Otero Dajud,
Secretario General del Senado, lleva liderando la maquinaria y la mafia que se
encarga de asignar oficinas, refundir proyectos, organizar las agendas
burocráticas que favorecen a sus patrocinadores, esos que al parecer manejan el
poder judicial y disciplinario del país para poderlo blindar con el aforo que
gozan los congresistas para que no surtan efecto las 10 denuncias que hasta el
momento cursan en su contra, esta eminencia del poder político de la Costa que
fue capaz de burlar una inhabilidad de quince años impuesta por la Procuraduría
General de la Nación para convertirla en 3 meses de suspensión, tiene el poder
detrás de los congresistas, mal representados si estamos.
Si no creamos conciencia al momento de elegir a los dignatarios que
tienen que tomar las decisiones que definen el curso de la justicia en este
país, si no ejercemos el derecho a capacitarnos para poder entender las
posiciones sucias y malintencionadas de los representantes del pueblo en el
Congreso de la República, estamos en desventaja al momento de dejarnos imponer
todo lo que favorezca a los barones de la Patria, es triste pretender que el
Presidente de la República resuelva toda la problemática y como el petardo del
Ministro de Justicia que fue designado para sacar avante este proyecto para
“Deformar” a la justicia, hasta eso le quedó grande, no en vano lo cogieron de
conejillo de indias para justificar como lo hicieron algunos servidores que
manifestaron que el señor Ministro tenía conocimiento de todo el Zoológico que
pretendían crear con todos los micos y orangutanes al interior de la reforma.
En ocasiones trato de observar los debates de control político y no
miento cuando simpatizo con algunos Senadores y Representantes, por su elocuencia,
versatilidad, oratoria y muchos más aspectos relevantes que les permiten marcar
la diferencia de otros, en esta oportunidad expreso mi decepción por el
Presidente de la Cámara Simón Gaviria, lamentable que manifieste que no tuvo la
oportunidad de leer todo el documento, para que se postulan a representar el
pueblo colombiano y cuando tienen que defender sus derechos se duermen o les da
pereza mental, por lo menos fue sincero al consignar ante los medios de
comunicación que no atendió con toda la disposición la Reforma a la Justicia.
El país sigue en un limbo jurídico y no hay unificación de criterio al
momento de emprender estos proyectos políticos, una vez más pierde el pueblo
pero no se convence que lo que existe no es un Congreso para construir si no un
Congreso para Delinquir, no se van a recuperar los $3.200.000.000.oo que
aproximadamente se invirtieron para darle vida a ese proyecto constitucional,
igual no pasara nada, el procurador en aras de buscar su reelección, Uribe
defendiendo a todos los bandidos que lo acompañaron en sus dos periodos de
Gobierno y el presidente Santos, sonriendo para las cámaras de los medios de
comunicación, amanecerá y veremos.
Con el cariño y el respeto de siempre
Raymon Guillermo Sales Contreras
Columnista Villanueva mi@
Mi hermano y entrañable coterráneo…lo malo de toda esta demagogia utilizada por nuestros dirigentes, es que les hemos salido a deber, olvidando ellos que son los representantes de todo un país pero lo triste, es que como a “la novia fea” que dejan plantada cada vez que quiere su “galán”, mañana le inventan un cuento nuevo, y vuelve y cae…ya comenzaron a vender la idea del desacuerdo con el desvío del río Ranchería en La Guajira y se encuentran de visita en los municipios aledaños a éste, incluidos los resguardos indígenas para convencerlos con su “espíritu altruista”…Hasta cuándo…qué deberá pasar para que cada uno de los colombianos salgan del letargo y decidan hacer cambios trascendentales en beneficio del colectivo; NO esperemos que cambie primero el vecino…yo decidí por un congreso renovado en su totalidad, y comienzo por mí, porque el CAMBIO SOY YO…usted amigo lector como parte activa de este proceso, qué piensa, qué va a decidir?