Uno no deja de sorprenderse
por los últimos acontecimientos que la justicia colombiana genera con sus
fallos contraproducentes, específicamente con algunos de ellos que son de
interés general y que han mantenido al pueblo colombiano expectantes, como si se
tratara de una novela y con los niveles más altos de sintonía que cualquier
medio de comunicación quisiera apropiarse como suyo.
Caso como el del ex diputado
del Valle y quien estuviera secuestrado por más de siete años, Sigifredo López,
quien ha demostrado con pruebas más que contundentes de su inocencia y sin
embargo continúa bajo prisión domiciliaria y con una persecución de parte de la
Fiscalía, que hasta el Fiscal General de la Nación ha tenido que intervenir y
cambiar al fiscal que llevaba el caso del ex diputado del Valle. La misma
Fiscalía le ha bajado el perfil ante la opinión pública, porque aparentemente
han cometido todos los errores y horrores en contra del dirigente político y no
contentos con las pruebas fehacientes, como las del FBI, ahora se han buscado
“testigos” para incriminarlo, guerrilleros estos, que la Fiscalía les ha dado
toda la veracidad del caso .
El otro caso en mención y que
ha tenido expectante a todo el país, es el caso del asesinato aleve y cobarde
del joven universitario villanuevero, Luis Andrés Colmenares Escobar, y como si
se tratara de una partida de ajedrez por parte de la defensa del más implicado
por este crimen, el también joven universitario Carlos Cárdenas Gómez, en
cabeza del ex fiscal general de la nación, Mario Iguaran, pidió la revocatoria
de la prisión en que se encontraba su defendido, en la cárcel modelo de Bogotá;
argumentando que el testigo de la Fiscalía Wilmer Ayola, mintió con falso
testimonio, alegato este que valido la juez de garantía María del Carmen
Vallejo, y le concedió la libertad a Cárdenas Gómez, el miércoles 18 de julio,
porque el testimonio del testigo no es confiable con las pruebas que presentó
la defensa, conseguidas de manera ilegal como lo explicó de manera amplia en la
audiencia publico el fiscal Luis González, quien lleva el caso por este
horrendo crimen. Este fallo ha generado toda clase de reacciones a nivel
nacional, las redes sociales han quedado estáticas por el giro de los
acontecimientos, especialmente de su padre, el prestigioso académico Luis
Alonso Colmenares Rodríguez, quien se pronuncio de inmediato y manifestó a los
medios de televisión nacionales que él con sus propios ojos había visto al ex
fiscal Iguaran entrar a la oficina de la juez de garantía antes de iniciarse la
audiencia pública. A lo que Iguaran ripostó que si se comprueba esto, él
entrega su tarjeta profesional. Pues va a tener que entregarla, porque las
grabaciones de las cámaras de seguridad de las oficinas de Paloquemao, muestran
al ex fiscal ingresando a las oficinas de la Juez que dictaminó el fallo y
permaneció ahí por espacio de 43 minutos en reunión con la Juez de garantía. Lo
que indica que no habido equidad e integridad por parte de la justicia
colombiana.
Las paradojas de la justicia
colombiana. A los políticos que han querido acabar y destruir, les han buscado
testigos de los que conformaron la mayor banda de criminales en Colombia y de
acuerdo a sus versiones, todos han sido condenados por los delitos imputados. A
ellos si les creen sin importar el daño que generaron a la Nación con sus manos
manchadas de sangre y sus testimonios son y han sido claves en el tan sonado
caso de la “parapolitica”, pero en cambio los testigos que bajo protección de
la Fiscalía, en el caso del asesinato del joven Luis Andrés Colmenares, la
defensa de los incriminados les han buscado hasta su acta de nacimiento, les
fabrican “dossier” y sus alegatos son aceptados por la justicia colombiana y
sentencian que los testimonios de dichos testigos “no son confiables” y por
ende carecen de veracidad. ¡Increíble!. Son las paradojas de nuestra justicia
en el país de la santísima trinidad.
Hernán Baquero Bracho
Columnista Villanueva mi@
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